Viernes
18 DicColegio Mackay frente a los desafíos de la educación actual
- Para nuestro Colegio el foco está puesto en que sus estudiantes puedan desenvolverse en el futuro como líderes para Chile en un mundo globalizado e interconectado. Esta mirada ha estado presente mucho tiempo antes de la irrupción de la pandemia causada por el covid-19.
- Contamos con profesores adjuntos que enseñan desde España, Argentina y también desde diferentes regiones de Chile, modelo que seguiremos profundizando.
- Niños del Play Group tuvieron este año experiencias de intercambios on line en inglés con colegios de Japón y de España.
“La situación de pandemia nos mostró que veníamos avanzando en la dirección correcta respecto de cómo interconectarnos con el mundo en materia educacional. Por supuesto, fue una situación inesperada, pero pudimos transformar las dificultades que se desprenden de una situación como la que vivimos en un gran aprendizaje para proyectarnos al futuro”. Así lo explica Christian Vergara, profesor de inglés, magister en Literatura, con 14 años en el Mackay, y actual Head of Senior Academics y Coordinador del Programa de Años Intermedios de Bachillerato Internacional (MYP), quien anticipa que el nuevo enfoque del colegio se basa en aprovechar al máximo el valor de las clases presenciales y aquellas que se realizan con modalidad a distancia, “que bien empleadas aportan mucho al proceso de enseñanza-aprendizaje”, asevera.
Comenta que han transitado por desafíos frente a esta pandemia para asegurar el proyecto educativo del Colegio, que se basa en la calidad de los programas de Bachillerato Internacional (IB) y los tres pilares fundamentales de la institución: excelencia académica, bilingüismo en inglés y valores deportivos, cuyo propósito es otorgar a los estudiantes una formación integral.
The Mackay School es el único colegio de la V Región y uno de los pocos en el país en contar con los tres programas de Bachillerato Internacional y su continuo: el dirigido a alumnos pequeños (PYP), con fuerte inmersión en inglés; aquel dirigido a los niveles intermedios (MYP), y el Diploma, para los estudiantes de curso superior. “La propuesta educativa del IB permite a los jóvenes que egresan del Colegio enfrentar preparados los desafíos de la educación superior y una vida profesional exigente. Pensamos que esta pandemia vino a confirmar eso. Hoy los estudiantes han compartido una misma coyuntura mundial y han estado pensando, reflexionando y trabajando sobre eso”, comenta.
Dice que este contexto de pandemia ha sido difícil para todos los colegios del mundo y confía en que es el concepto de educación el que se mantiene. “Lo que ha sido incorporado es una nueva forma de enseñar y aprender. Los ambientes digitales se han convertido en una oportunidad. El profesor es un profesional que ha incorporado mucho más que antes la tecnología a sus prácticas y que la utiliza como un medio para vincularse de mejor manera con los estudiantes, a nivel sincrónico y asincrónico”.
Explica que el alto grado de resiliencia demostrado por alumnos y profesores ha sido importante y lo atribuye en gran medida a la educación a través de los programas del IB: “El programa promueve una formación en un conjunto de atributos que son esenciales en esta comunidad de aprendizaje. Se espera que todos sus integrantes sean íntegros, indagadores, pensadores, equilibrados, buenos comunicadores,instruidos, solidarios, audaces, reflexivos y de mentalidad abierta, todo aquello que nos predispone mejor en esta compleja situación que hoy es tiempo de valorar como una oportunidad”.
Y es que los programas de IB, según sus palabras, enfocan su propuesta educativa en el desarrollo de habilidades fundamentales y el compromiso responsable con la ciudadanía en cualquier lugar donde se desempeñen en el futuro. “Desde el punto de vista de la pandemia, eso es un desafío. En los distintos trabajos entregados por los estudiantes, se plasma un interés genuino por el mundo en que viven”.
El académico comenta que el colegio tiene una planta docente altamente calificada, que se capacita en forma permanente en los programas propios del IB. “Contamos con profesores adjuntos que apoyan a los estudiantes desde diferentes partes del mundo. Existen profesores que enseñan desde España, Argentina y también desde diferentes regiones de Chile. Se trata de expertos, doctores y magister de prestigiosas universidades que apoyan áreas y asignaturas específicas”.
Profesores de otras partes del mundo
Licenciado en Letras en la Universidad de Buenos Aires, Argentina, Marcelo Ventrice trabaja desde 2012 en instituciones asociadas al Programa del IB: Buenos Aires (2012-2017); París (2018), y Barcelona (2019-2020).
El profesor Ventrice colabora mucho con el trabajo de estudiantes de cursos superiores del Mackay y lo hace desde Barcelona, en temas relacionados con el Diploma que estudian los alumnos. “Una de las características más valiosas del Programa IB es el foco en la mentalidad internacional, que prepara al alumnado para enfrentarse a un mundo globalizado e hiperconectado. La internacionalidad como mentalidad aporta diferentes perspectivas y puntos de vista culturales, sociales, políticos, ideológicos, religiosos y económicos que favorecen la reflexión de uno de los mayores retos de la actualidad: la inclusión”.
Para él, sería demasiado aventurado establecer conclusiones sobre la educación a distancia en este complejo contexto en el que las decisiones y las soluciones surgen tan paralelamente a la aparición de los problemas derivados del covid. Sin embargo, dice, “la urgencia y necesidad de adaptar programaciones y planificaciones a la educación a distancia obligó a todos los participantes de la vida escolar a establecer prioridades y desarrollar nuevas formas de transmitir el conocimiento. Estas reflexiones servirán de ventaja para el futuro”, resalta.
Ventrice dice que ante la incertidumbre propia del avance del covid-19 u otras nuevas cepas del mismo virus, se hace indispensable empezar a repensar cómo reconvertir la educación tradicional en telemática, ya sea a distancia o mixta. Es evidente que el uso de la tecnología será una de las herramientas fundamentales de los tiempos que se avecinan, pero también será esencial que los docentes sepan guiar a sus alumnos en el buen manejo de la independencia, la autonomía y el tiempo, tanto on line como off line”.
Mónica O’Keeffe es profesora adjunta a distancia para los cursos superiores del Mackay. Es licenciada y profesora en letras. Su carrera académica comenzó en 1986. A partir de 2010 se vinculó al programa IB, primero como examinadora y luego como profesora. Desde hace 5 años es jefa de equipo y estandarizadora en IB. Actualmente se desempeña como tutora de Monografías, desde Buenos Aires, en línea, entregando apoyo a cada alumno del colegio que desarrolla estas tareas.
Comenta que esta pandemia ha forzado una nueva perspectiva profesional. “Me sorprendió cuando comenzaron a abrirse posibilidades en el exterior. Estoy muy feliz con esta nueva veta profesional que me ha permitido sentir más profundamente la mentalidad internacional de los alumnos. Se extraña mucho la presencia, pero no podemos negar que ha sido el gran descubrimiento del XXI para un cambio en la educación. Nuestros alumnos son nativos digitales, están muy preparados para poder trabajar a distancia. Vivo la educación de 2021 como un cambio positivo, con desafíos, por supuesto, pero nada que no podamos sortear”.
Diploma
En 1986 el Colegio incorporó el Diploma IB que es cursado por los
alumnos de II, III y IV Medio. Más tarde, y con la finalidad de consolidar el continuo de los programas, The Mackay School pidió la autorización a IB para impartir el Programa de Educación Primaria (PYP), la que obtuvo
en 2016. Finalmente, el colegio fue autorizado para impartir el Programa de Años Intermedios (MYP) para alumnos de 6º Básico a I Medio, lo cual acreditó en 2019.
Silvio Bermúdez, Coordinador del Programa Diploma de Bachillerato Internacional del Mackay, es licenciado en Historia y Magíster en Relaciones Internacionales de la PUCV. También es profesor de las asignaturas de Historia y Economía del programa Diploma del IB y es miembro activo de la Red de Educadores de Bachillerato Internacional (IBEN).
“El programa fomenta la comprensión y aprecio por otras culturas, lenguas y puntos de vista. Tiene como objetivo el desarrollo de habilidades y actitudes en las nuevas generaciones que les permitirá realizar su contribución para un mundo mejor mediante acciones concretas”, expresa.
Cuenta que Bachillerato Internacional fue creado en 1968, sobre de la base de las corrientes pedagógicas más relevantes del momento, con la convicción de que se puede construir un mundo mejor a través de una educación centrada en conceptos, ideas y cuestiones que trascienden los límites disciplinarios, culturales, nacionales y geográficos.
El Diploma IB comprende el estudio simultáneo de seis asignaturas y componentes troncales durante dos años. Está concebido para desarrollar las habilidades académicas básicas que requerirán los estudios universitarios y el desempeño profesional futuro. Además, el programa apoya el desarrollo de las habilidades prácticas y los valores para una vida plena.
Para el profesor Silvio Bermúdez el aspecto central de la educación del IB es el desarrollo de ciertos atributos que distingue a sus miembros durante toda la vida y que se concretan en un perfil de esta comunidad de aprendizaje. “Uno de estos atributos es el continuo esfuerzo por ser audaces; esto es, abordar la incertidumbre con previsión y determinación. Se espera que los jóvenes muestren ingenio y resiliencia cuando se enfrentan a cambios y desafios”.
Continúa: “en un mundo absolutamente integrado y conectado, el nuevo ciudadano debe asumir cuestiones de alcance global. Sin duda, una de los problemas más complejos ha sido la pandemia, que derivó en la transformación de la actividad académica, ya que los jóvenes lograron comprender que el colegio como infraestructura física, con sus salas, canchas y oficinas estarían cerradas, pero la escuela estaría abierta. Aquello que es la esencia del trabajo de estudiantes con sus profesores, nunca se cerró, permaneció abierto con la ayuda de la tecnología, transformando su forma de trabajo que debían asumir con responsabilidad y organización. Por cierto, no todos estaban preparados, algunos pensaban que las actividades estaban suspendidas o que el colegio estaba cerrado. Sin embargo, asumieron que este nuevo escenario exigía mayor disciplina y compromiso con los deberes académicos”.
“Un estudiante que ha sido capaz de transitar por momentos complejos se ve fortalecido cuando los considera para su aprendizaje. Un contexto adverso siempre sitúa a la persona con opciones y, en este caso en particular, debe ser la oportunidad de fortalecer el carácter y avanzar con determinación en nuestras tareas, realizando al mismo tiempo nuestra contribución al desafío global”, sostiene.
Concluye que “siempre habrá momentos difíciles en los distintos escenarios que una persona debe desempeñarse. Todas las generaciones han debido enfrentar algunos problemas complejos, y a esta generación les ha tocado la pandemia”.
Los más pequeños del Colegio
Evangelina Di Girolamo, Head of Junior Academics, es profesora general básica de la UNSAM, en Buenos Aires, es también profesora de inglés e inglés técnico UTN (Buenos Aires), tiene una especialidad en Proficiency English en la Wimbledon School of English, de Londres, y un magister en liderazgo y gestión de organizaciones escolares en la PUCV.
Resalta que en The Mackay School los profesores del Junior School (Play Group a 5º Básico) han potenciado al máximo sus habilidades tecnológicas en este tiempo complejo, presentando desafíos cotidianos que han resultado exitosos.
Comenta que el Junior School la tecnología es un eje fundamental en el quehacer docente y pedagógico. Explica que desde 2016 se implementaron licencias electrónicas como recursos de aprendizaje cotidiano en los alumnos sumando a ello el proyecto de adquisición de Ipads desde 2014 a la fecha.
Miss Di Girolamo comenta que en el futuro cercano la educación será mixta (híbrida) y deberá potenciar esta nueva forma de relacionarse. “Los profesores deberán adaptarse a un sistema educativo que debe reinventarse para llegar al futuro de manera competitiva, orientándose a desarrollar las habilidades de los alumnos para trabajar en colaboración y adaptarse a entornos de cambio constante. Para ello, hay que cambiar la manera en la que se transfieren los conocimientos y las habilidades. Hoy más que nunca el sello de la filosofía de educación de los programas del IB, con los que cuenta el Mackay, son vitales y esenciales para acompañar los procesos que nos desafía el futuro cercano”.
Para Evangelina Di Girolamo realizar clases a distancia con alumnos pequeños tiene muchas ventajas. “Aprender desde un sistema D-Learning no tiene por qué afectar a la calidad y eficacia de las clases”, dice.
“Una de las ventajas más importantes en los niños, es que el sistema de enseñanza on line ha permitido realizar clases y sesiones personalizadas, atendiendo con mayor atención a las necesidades específicas de cada alumno, así como también ha potenciado en ellos el desarrollo de la autonomía y la responsabilidad desde edad temprana”.
Consultada sobre las dificultades que pudiera presentar la lectoescritura comenta que “una de las mayores preocupaciones de los padres de niños que cursan Kinder y 1º Básico en todo el mundo, es si estos serán capaces de aprender a leer y a escribir a través de métodos a distancia en tiempos de covid”.
“Soy una convencida que se trata de un objetivo que requiere de los mejores esfuerzos de los colegios y de la mayor participación de las familias: por una parte depende del material que cada establecimiento diseñe y comparta con sus alumnos y también del tiempo que las familias puedan dedicar a sus hijos, en medio de sus propias obligaciones”, expresa.
Sostiene que “en casa se puedan generar ambientes letrados para los niños a través de la lectura de cuentos en los que el estudiante pueda elegir qué cuento leer, responder preguntas después de la lectura del adulto e, incluso, si es posible, inventar sus propias historias a partir de algún juguete o animal favorito. “Esto ayudará a potenciar espacios de contacto humano para desarrollar las habilidades en sus hijos, pieza clave en la adquisición de la lectoescritura en esta etapa escolar”.
Segundo idioma
Verónica Cordero es profesora de inglés y licenciada en lengua y literatura de la PUCV. Actualmente es Coordinadora del Departamento de Inglés del Área Senior.
La docente sostiene que la posibilidad de comunicarse en dos idiomas permite una relación flexible con el mundo, ya que derriba barreras, otorga la posibilidad de estar mejor informados, instruidos, actualizados y preparados para un mundo en constante cambio.
“Cuando tuvimos que adaptarnos a la educación on line, utilizamos todos los recursos que teníamos a nuestro alcance para hacer que las experiencias de aprendizaje fueran lo más significativas posibles. La tecnología juega un rol preponderante en nuestro proyecto educativo y es, al día de hoy, el medio que nos permite realizar nuestra labor docente”.
La flexibilidad del proceso de enseñanza-aprendizaje es la que nos ha permitido ir adaptándonos de manera gradual a los cambios del presente y de aquellos que se avecinan, entendiendo que trabajamos con alumnos que se encuentran en una etapa de identidad y autoestima. Creamos los espacios de reflexión para que los estudiantes expresen sus emociones e inquietudes, desarrollando sus habilidades sociales y de comunicación en un formato más espontáneo en un segundo idioma.
El deporte como un valor
El profesor Rodrigo Boye, es exalumno del Mackay. Integró el equipo de rugby del Old Mackayans entre 1986 y 1999, más el año 2004. Fue miembro del Staff de Selecciones Nacionales entre 2005 y 2014. Actualmente es el Coordinador de Deportes del Colegio.
Para él, el grado de incertidumbre que existe a nivel nacional respecto al futuro comportamiento del covid no permite visualizar con claridad qué sucederá con la actividad deportiva. “Sin embargo, tenemos toda la intención de retomar de manera gradual el máximo de actividades físico-deportivas posibles, ojalá de forma presencial, para que nuestros alumnos vuelvan a beneficiarse de todo aquello que el ejercicio nos reporta tanto en el ámbito físico como en lo psicológico y social”.
Comenta que “la actividad física y el rugby en particular son medios muy importantes que ayudan en la formación integral de los jóvenes. Esperamos volver lo antes posible, apenas las condiciones sanitarias lo permitan”.
“Nuestro Colegio pone un énfasis importante en el fomento de la actividad física y deportiva, pues crea un hábito de vida saludable y es un medio a través del cual se puede enseñar y poner en práctica valores tan importantes como son el honor, la honestidad, la lealtad, el respeto, la responsabilidad y la perseverancia, además de la generación de vínculos interpersonales y el aprendizaje relacionado a la solución de conflictos”.
Este año hemos concretado intercambios con algunos colegios argentinos que han derivado en entretenidas actividades deportivo-recreativas a través de la plataforma Zoom. Es así como, con el Belgrano Day School tuvimos un encuentro deportivo con 7º Básico y con el Colegio New Zeland Pacific hemos compartido varias clases de Educación Física con III Medio y 6º Básico.
La experiencia vale
Leonardo Antivilo es un profesor con vasta experiencia docente y una larga trayectoria en el Mackay. Su adaptación a la nueva forma de enseñar ha sido una historia de éxito.
Titulado de la carrera de Pedagogía en Biología en la Universidad Católica de Valparaíso, trabajó durante 10 años en esa casa de estudios impartiendo la cátedra de Fisiología Vegetal para las carreras de Agronomía y Biología, a la vez que realizaba cursos de preparación para rendir la entonces Prueba de Aptitud Académica para ingresar a carreras relacionadas con su especialidad en diversos preuniversitarios de la región.
Llegó al Mackay en 2000 para hacerse cargo de los cursos de Biología del IB en el nivel medio y superior, apoyando a cientos de alumnos a superar con éxito el programa del Diploma y potenciar sus habilidades y competencias científicas, las cuales son evaluadas con exámenes externos de acuerdo a estándares internacionales.
“Tengo muy presente cuando el lunes 16 de marzo nos comunicaron que, por razones de seguridad sanitaria, debíamos realizar cuarentena. Ese día cambia el paradigma de las clases presenciales y, en mi caso, la manera de hacer clases en laboratorio”.
“Al comienzo realizábamos clases a distancia con actividades asincrónicas monitoreadas a través de una plataforma digital. Cuando la alerta sanitaria se extendió, tuvimos que ser capaces de ir más allá y empezar a conectarnos con nuestros alumnos a través de videoconferencias en los horarios normales de clases, transformando espacios del hogar en salas de clases y laboratorios.
“Resiliencia es la palabra que se impuso este año. Adaptarnos todos los días a las condiciones cambiantes de esta nueva realidad. Frente a esto soy optimista. Estoy seguyro que saldremos más fuertes y mejor preparados para implementar de manera permanente todas las nuevas tecnologías en la educación de nuestros alumnos”, sostiene.
Agrega que “los laboratorios en casa se generan como necesidad, para que nuestros alumnos trabajen con las habilidades de experimentación científica. Al ir experimentando con elementos sencillos que encuentran en sus casas, no pierden la posibilidad de llevar a cabo todo lo que implica la rigurosidad científica de reconocer y aplicar todas las variables en sus experimentos”.
Como mensaje a los profesores Leonardo Antivilo expresa: “Se requieren profesores apasionados con la enseñanza, actualizados en las nuevas metodologías y preparados para enseñar a pensar a las nuevas generaciones, apoyándolos para que sean independientes, con mentalidad abierta y espíritu crítico”.
.
